Ordinario de la Misa
PREFACIO I DE LAS ORDENACIONES
EL SACERDOCIO DE CRISTO Y EL MINISTERIO DE LOS SACERDOTES
67. Este prefacio se puede decir en la misa de la ordenación de presbíteros.
V/. El Señor esté con vosotros.
R/. Y con tu espíritu.
V/. Levantemos el corazón.
R/. Lo tenemos levantado hacia el Señor.
V/. Demos gracias al Señor, nuestro Dios.
R/. Es justo y necesario.
En verdad es justo y necesario, e nuestro deber y salvación
darte gracias siempre y en todo lugar,
Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno.
Que constituiste a tu único Hijo
Pontífice de la Alianza nueva y eterna
por la unión del Espíritu Santo,
y determinaste, en tu designio salvífico,
perpetuar en la Iglesia su único sacerdocio.
Él no sólo ha conferido el honor del sacerdocio real
a todo el pueblo santos,
sino también, con amor de hermano,
ha elegido a hombres de este pueblo,
para que, por la imposición de las manos,
participen de su sagrada misión.
Ellos renuevan en nombre de Cristo el sacrificio de la redención,
y preparan a tus hijos el banquete pascual,
donde el pueblo santo se reúne en tu amor,
se alimenta con tu palabra y se fortalece con tas sacramentos,
Tus sacerdotes, Señor, al entregar su vida por ti
y por la salvación de los hermanos,
van configurándose a Cristo,
y así dan testimonio constante de fidelidad y amor.
Por eso, nosotros, Señor,
con los ángeles y los santos cantamos tu gloria diciendo:
Santo, Santo, Santo...
No hay comentarios:
Publicar un comentario